El uso del barbijo, la limpieza de manos y superficies, sumado al distanciamiento social, son las herramientas que la sociedad tiene para evitar que los contagios sigan aumentando. En el caso puntual de la limpieza, el alcohol es el producto emblema.
San Iginio es una empresa tucumana, de las pocas en el país avalada por ANMAT, que fabrica alcohol de gran calidad. Instalada ya hace varias décadas, la compañía familiar tuvo que hacerle frente a la gran demanda durante estos meses. “Fue un gran desafío, sobre todo porque al principio los productos complementarios que necesitamos para la fabricación estaban escaseando”, comentaron desde la empresa, que distribuye sus productos a todo el país.
Por suerte los tiempos se normalizaron y ahora San Iginio puede abastecer la gran demanda de alcohol en toda Argentina. Entre su gran oferta de productos se destacan presentaciones de uso personal, como son las botellas de 250 o 500 mililitros hasta los bidones de cinco litros, que comenzamos a ver con regularidad en locales comerciales, bares e instituciones que congregan a gran cantidad de personas.
Por el momento el uso del alcohol seguirá firme, según muchos especialistas luego de pasado un tiempo e instalados en lo que se conoce como nueva normalidad las costumbres de limpieza serán algo a lo que, necesariamente, debemos incorporar.